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Wednesday, August 24, 2011

EL BANQUETE INFINITO: CRÓNICA DE ALGUNAS GENERACIONES.


Foto: Mario García Joya.

Alberto Pedro Torriente escribió el banquete infinito hace quince años.Justo fue ese tiempo el que tuvo que pasar para que la obra fuese estrenada.En un análisis no intelectual del contexto histórico en el que se creó , podemos confirmar la naturaleza misma de la farsa, se origina en el absurdo de una realidad. No es para nadie ajeno que Cuba es un fenómeno digno de ser vivido para ser comprendido.En solo veinticuatro horas transcurre la trama. Veinticuatro horas que pueden ser años si se miran como la secuencia del día siguiente.La espera es una constante en el desarollo de cada uno de los personajes. Primero el Jerarca(Carlos Alberto Pérez)que en su introductorio monólogo se debate en filosofías ante la ineficiencia de su sistema.Es natural que la demagogia sea un antónimo de la autocritica.El jefe de gobierno , en su discurso, se justifica constantemente.Reprochando las inquietudes , disfrazadas de algarabía , recrimina al pueblo ,sin ni siquiera entender el sentido de las palabras emitidas. Finalmente la locura , en ciertos casos suele ser la consciencia, toma por sorpresa al personaje.En su demencial discurso vuelve a apoderarse de una especie de lujo de final en el primer acto.Es la silla una obsesión ya sabida por los gobernantes o simplemente el bastón con el que apoyan sus debilidades.Cabe preguntar pero de repente vuelve el vuelco de la historia, precedida por la llegada de estos seres llamados "Viriles" las cuales tienen una suseción númerica como apellido.

El orden númerico en los sistemas de control , siempre ha sido una verdad oculta.También se usa para denotar los posibles rangos de los capitanes de estado que toman por sorpresa el palacio de gobierno.Virilsegunda(Leandro Peraza Viso) quien en realidad va a la cabeza de la tropa, es un militar colérico y desconfiado , sin la menor vacilación ataca porque está escrito en su naturaleza belicosa.Viriltercera(Tomás Doval) es la inteligencia gris, el gran manipulador.Se desconocen sus intenciones, ni a que punto cardinal gira su brújula.Su amargura existencial es notable, debido, a que probablemente el ansíe también el trono pero la consecuencia de su propia mediocridad , le haya impedido alcanzar mayores rangos.Suele ser un enemigo más peligroso debido a que oculta más de lo que expresa.

Virilprimera(Alain Casalla)Un militar de palabras mutiladas que usa un abanico como medio de comunicación y al que solo Viriltercera entiende, viene como espectro de un misterio constante que dura durante toda la trama.Es chino pero no habla en chino , su idioma a base de sonidos, pueden ser la advertencia de un complot aún mas peligroso de lo que se piensa.

Perogrullo(Micheline Calvert)es el artista, por excelencia, al servicio de los gobernantes.No sabemos lo que busca , ni siquiera de donde vino.Este bufón perdió hace mucho tiempo su propia identidad para convertirse en una sombra del jefe de turno.Canta sus canciones con cierto desgano, proveniente de un cansancio milenario:el de tener que decir lo que otros quieren que digas.Testigo ocular de todos los sucesos , los cuales pasan por sus ojos como un colador de emociones.No existen en sus ojos, chispa alguna , ni detonador que indique si realmente está de acuerdo o en contra.

Paradigma(Carlos Alberto Perez)Viene en sucesión del derrocado jerarca, se nos muestra como una especie de Robin Hood del caribe aunque al final nos damos cuenta que todo esto es una utopía creada por la ignorancia de un mal de fondo.Es un gobernante liríco, con aires de Don Quijote , que exhorta a seguir lo imposible e irrealizable.Se vuelve a perder por un camino equívoco donde las manipulaciones de su ejército sirven como atenuante para el preámbulo de un final, el cual me reservo, en honor de los que no la han visto.

Averrara(Yvonne Lopez Arenal)La primera dama y acompañante de Paradigma , representa una dualidad por ser uno de los simbolos más emblematicos de la obra.A través de ella revives las voces del conglomerado que se escuchaba antes , a lo lejos.Es una mujer como cualquiera pero también el pretexto mágico de la inocencia en una sociedad degradada. Un ave , en ocasiones que se torna sagrada su propio destino.La gran heroína, quizás la mujer destinada a llevar el coraje de ser la única , que es ella misma.En cada una de sus líneas refleja la realidad , de la que hasta ahora, nadie se habia atrevido a hablar.Siempre han tratado de disfrazar las atrocidades con las palomas.Averrara no se deja colocar atributos de muerte, su busqueda transciende el discurso facilista , las manipulaciones externas y ambiciones de poder.Solo desea que su familia se alimente , algo tan primario como conmovedor.Esta ave , paradoja de una nación mutilada , victíma de la innanición del ser. Nos deja quizás el sabor más representativo de toda la obra.

Miriam Lezcano Brito directora de la obra pero además viuda del autor.Teje el emblema de lo que fue su vida junto a él.Ella vió crecer a cada uno de estos personajes cuando el escritor repetía sus parlamentos a deshoras.Esperar, siempre nos toca esperar, pero en su momento hubo de salir a la luz sus carcajadas.Tanto Miriam como Alberto como cada uno de los que llevamos de la mano este proyecto, que a la vez se convierte en muchos otros que están afuera y adentro. Hemos de reir una vez más para que el absurdo no nos vuelva a tomar de sorpresa.Alberto hoy ríe en los amaneceres de la habana como los de miami , como los de París.Es como una vez dijo , ciudadano del viento.Un aire traido para recordarnos una vez más cuales son las bases de nuestra esencia como seres humanos.
EL BANQUETE INFINITO

AKUARA TEATRO SALA AVELLANEDA
4599 S.W. 75 AVE
Miami FL 33155
786 853 1283
Entrada General $20.00 Descuento a estudiantes y seniors(mostrando ID)

Viernes y Sábados 8:30 pm

Productor General:Carlos Rodriguez
Producción: Alba Borrego y Mario García Joya

Elenco:

Carlos Alberto Pérez
Yvonne López Arenal
Micheline Calvert
Leandro Peraza Viso
Tomás Doval
Alain Casalla

Asistente de dirección: Joan Vega
Diseño de Luces: Mario García Joya
Diseño y realización de utilería y vestuario: Alba Borrego
Notas al programa: Rosa Ileana Boudet
Técnico de Luces: Rolando G. Santini
Diseño de Tarjeta:Ignacio T. Granados
Fotos: Iván Cañas y Mario García Joya
Grabaciones de Coros: Rogelio López Marín (Gory)

Tuesday, August 23, 2011

Banquete de talento.



Fotos: Iván Cañas.

Banquete de talento

by Baltasar Santiago Martin on Tuesday, August 23, 2011 at 2:45am


Únicamente quien ha vivido bajo el imperio de una libreta de “desabastecimiento” en un régimen de propiedad estatal sobre los medios de producción y servicios –léase socialismo al duro y sin guante– puede entender el odio del “jerarca” al apetito del “conglomerado”, así como su consigna de “no se dejen confundir por el sonido de sus tripas”, en esta lúcida y cruda alegoría sobre la lucha “obrera” por el poder que es la obra teatral El banquete infinito, de Alberto Pedro, donde, más que un banquete, estamos en presencia de una verdadera orgía de metáforas brillantes y excelentes actuaciones.

Aunque ya Orwell abordó de manera genial en su Rebelión en la granja –donde los cerdos acaban siendo “más iguales” que el resto de los animales y que las personas destronadas– el tema del comportamiento de los líderes mesiánicos una vez que se apoderan del poder, ya sea por las buenas o por las malas, El banquete infinito sorprende, en primer lugar, por haber sido escrito por el autor en Cuba –donde los árboles pudieran no haberle dejado ver el bosque– , y en segundo, por su clarividencia y vigencia, pues Alberto Pedro ha partido la chirimoya al medio, dándole un matiz universal a una tragedia que pudiera parecer local para los nórdicos, pero no para los auditorios latinoamericanos, hartos de Evitas enjoyadas, piñatas sandinistas, derroches de Chávez y orgías consumistas de la nomenclatura revolucionaria castrista.

“¡Apetito!”, grita el jerarca enfurecido con la garganta prestada de Carlos Alberto Pérez, el magnífico actor que se desdobla después de modo impresionante en el guerrillero que lo derroca. Renuente al principio a ser llamado “Paradigma” por sus compañeros de armas, luego se olvida de ser simplemente Chucho para volverse una copia del anterior jerarca.

“Las Viriles”, esa tríada de tan representativa ambigüedad, le dan un eficaz tono surrealista a la obra, que quizás sirve para hacer más comprensible y real la metáfora (¿Dulces guerreros cubanos, tal vez?), a la vez que la desmarcan del odioso y gris realismo socialista que sobrevendrá “cada 24 horas”, según la proclama “paradigmática”.

Alain Casalla, como Viril Primera, demostró un perfecto dominio de su rol en escena, tanto de su cuerpo como de su emblemático abanico (pudiera haber sido también una suave chalina “icaica”, o un blazer sobre los hombros, nada viril, por cierto); mientras que Leandro Peraza, posesionado por esa especie de esperpento totalitario que es Viril Segunda, volvió a ser el poderoso intérprete trágico que ya evidenció con creces en Oda a la tortura, con formidable proyección de la voz, fluido movimiento escénico, y total dominio de sus parlamentos y de sus significados. A su vez, Tomás Doval, como Viril Tercera, matizó con adecuada introspección su personaje, para diferenciarlo de sus aparentes clones, mucho más previsibles y esquemáticos que el suyo.

Ivonne López Arenal, la Ave Rara de la obra, especialista en “Labajología”, como el personaje mismo se anuncia, descendió del Olimpo de sutileza y contención donde generalmente habita como actriz para entregarnos una mujer común, desenfadada, populachera y sensual, que sigue fiel a sus orígenes y a su familia, como debe de ser pero no siempre es; y Micheline Calvert, en el difícil papel de Perogrullo, encarnó de modo magistral, sin ninguna estridencia, a ese intelectual oportunista que le vende su alma al jerarca –y a quien le suceda– con tal de no perder sus privilegios.

Claro que toda esta orgía de talento interpretativo no se hubiera podido lograr sin el de Miriam Lezcano, directora y cocinera de este gran banquete teatral y actoral; los funcionales decorados y el vestuario de Alba Borrego, el diseño de luces de Mario García Joya, con Rolando G. Santini y Elena Montes de Oca como técnicos, y el excelente sonido de Gory; ¡qué viva pues Akuara Teatro y su Jamalismo; carne roja para todos!


Baltasar Santiago Martín
Fundación APOGEO para
el arte público
Miami, 22 de agosto del 2011

Thursday, August 18, 2011

El banquete infinito: El coro que no es tan coral.


[foto de Iván Cañas] 
Tomás Doval, Alain Casalla, Leandro Peraza.
 
El coro que no es tan coral

Entre las características del teatro de Alberto Pedro estaría su estructuralismo clásico, sobre todo en este de El banquete infinito; con el que llega incluso a rescatar la función dramática del coro, como una condensación de la realidad que interpela a los personajes y los complementa. Si se recuerdan los orígenes del teatro en las procesiones pánicas, se resalta esta función; con parlamentos que evolucionan desde el himno con esa inclusión del coro, hasta llegar al diálogo formal. El coro aparece así en el teatro antes incluso que el antagonista y cualquier coprotagónico; y adquiere valor propio por esa ambigüedad inicial, en que su informidad como abstracción se abre a la exposición más completa y compleja del drama. No obstante, el teatro de Alberto Pedro Torriente no es clasicista ni arcaico sino exactamente funcional; recuérdese que él proviene de la actuación y la literatura, y de ahí esa fuerte estructuralidad, que le permite explotar esta riqueza ya desechada de los antiguos.

Específicamente en esta puesta de El banquete infinito, el coro tiene una presencia extremadamente singular; primero, al lograr desdoblarse desde el fondo casi de utilería a una apoteosis que remarca el eje dramático, acaparando el antagonismo total. En particular, cada una de las viriles —los personajes que integran el coro— tiene una catarsis propia; de modo que en un tempo perfecto comienzan a perfilar sucesivamente esa apoteosis final, concretándose desde la abstracción a un personaje —y valga la contradicción— aún amorfo pero concreto. De nuevo palmas para la producción de esta puesta [Alba Borrego], que trabajó las caracterizaciones hasta el más mínimo detalle; y para la dirección de Miriam Lezcano, que pudo amoldarlos en una interpretación tan equilibrada que compensa lo caricaturesco con lo dramático.

Con todo ello, las actuaciones de Leandro Peraza, Tomás Doval y Alain Casalla tuvieron un magnífico reto; ya que no quedaban protegidos por el anonimato del coro tradicional, sino que fueron sucesivamente empujados al proscenio. Un trabajo que más que digno fue suficiente, lo que no es poco; sobre todo si se tiene en cuenta que enfrenta al omnipresente y épico protagonista, la lírica evolución de la coprotagonista, y un envidiable jockey [Micheline Calvert] que parece escrito para que se robe el show.

Friday, August 12, 2011

El banquete infinito. Nota de Matías Montes Huidobro.





 Foto: Iván Cañas.


El banquete infinito

La precocidad contrarrevolucionaria de Virgilio Piñera en torno al tema del hambre, expresada en El flaco y el gordo, será retomada por Alberto Pedro con El banquete infinito

Matías Montes Huidobro
, Miami | 11/08/2011
Cubaencuentro.

Cuando a principios de la Revolución se estrena en Cuba El flaco y el gordo,Virgilio Piñera no hizo más que anticipar toda la trayectoria del hambre que va a ser la nota caracterizadora de un proceso ideológico dominado por el estómago (con sus raíces literarias en la picaresca española y “la importancia del tasajo” presente en nuestro teatro vernáculo), razón de ser de todas las revoluciones, que no se gestan en el cerebro (como pudiera pensar el pensamiento marxista) ni en el corazón (como pudieran haberlo hecho los románticos del siglo XIX) sino en ese largo proceso que nos lleva de los placeres gustativos a la larga trayectoria intestinal que conduce al más definitorio y existencialista de todos los desenlaces, el cual, a su vez, nos encamina hacia el no menos filosófico tema de la mierda, que a la larga es a la materia subyacente pero que vamos a pasar por alto en este momento. Tan delicado asunto, deja constancia de la garra castrista, como demuestra Alberto Pedro en El banquete infinito, y aunque nunca lo conocí, por el carácter irreverente de su obra, estoy seguro que estaríamos de acuerdo.

El tema de la comida es definitivamente uno de los más caracterizadores del arte de la conversación de los cubanos, que en eso nos parecemos a los franceses, ya que a la hora del almuerzo estamos, ellos y nosotros, hablando de lo que nos llevaremos a la boca durante la cena; y que en Cuba va a tener uno de sus momentos culminantes en el llamado “período especial”, construyéndose así la imagen substancial de una Revolución que trascendiendo lo ideológico va a parar en el más primario de todos los procesos fisiológicos, el de la digestión, cuya solución no ha encontrado, y que de no poder llevarse a efecto debidamente produce, como en el caso del corazón y del cerebro, al más trágico de los desenlaces en ese lugar tan representativo de los avatares de la revolución cubana donde “resolver” sería la respuesta cotidiana de lo insoluble. Se trata, en realidad, de “un banquete infinito” de la nacionalidad, con el cual ha batallado tanto el castrismo hasta llegar a la creación léxica de “jama”, termino original que distingue el quehacer revolucionario cubano del resto del mundo.

No es de extrañar que, desde el año 1959, cuando se lleva a escena la obra de Piñera, este tuviera que andar justificando su precocidad contrarrevolucionaria en torno al tema del hambre, que Alberto Pedro va a retomar en el 1996 con El banquete infinito. Ya desde Manteca, una obra que empieza diciendo “¡Hay que hacerlo!”, “¡Hacerlo!”, “¿Hacerlo?”, “Sí. ¡Hacerlo!”, refiriéndose explícitamente a meterle un cuchillo a un cochino, viejo, decrépito y fofo, como acción inmediata para “resolver” el problema nacional del hambre, había dado un paso importante en la dramaturgia cubana, proponiendo una salida no solo para comer sino para derrocar la tiranía y “resolver” de forma definitiva.

Esto no es una verdad de Perogrullo, al modo de unos de los personajes más logrados de la obra, aunque nos lleve al tema de la esquizofrenia del léxico, uno de los problemas más complejos del proceso revolucionario cubano, que entronca a su vez con el lenguaje catedrático del bufo cubano, hasta el punto de inventarse en Cuba un nuevo lenguaje, que visto en la distancia es casi abstracto, y que hace tan difícil que los cubanos se entiendan, en un ejercicio de estilo que empieza en la boca y termina en el otro extremo del aparato digestivo, asunto más delicado de lo que a primera vista parece. No obstante, se trata de un lenguaje que no es lo suficientemente abstracto como para no comprenderse, especialmente a nivel de estómago, particularmente entre los cubanos que no “jaman”, y que diez años después, por el significado popular, cotidiano y nacional del cubanismo, le costó caro a Juan Carlos González Marco por querer “jamar” ante las cámaras de la televisión, dando lugar en 2009 al bien conocido “caso Pánfilo”, que hace del “jamar o no jamar” de la obra en escena, un texto de ramificaciones shakesperianas de muy diferentes connotaciones, que Alberto Pedro acuña teatralmente, llegando al meollo revolucionario del mismo.

El estreno mundial de El banquete infinito no ha tenido lugar en Cuba, sino en Miami, siguiendo la trayectoria de textos subversivos que no se estrenan en su país de origen, o que se estrenan muchos años después de haber sido escritos, y en algunos casos cuando sus autores están muertos y bien enterrados, como, por cierto y paradójicamente, ocurre también en Miami. Después de todo, son dramaturgos cubanos sujetos a muchos avatares personales y colectivos.

Le corresponde a Akuara Teatro el privilegio de este montaje, inaugurando con esta obra su recorrido escénico en Miami, en una temporada teatral que durará hasta el 16 de septiembre, dirigida por Miriam Lezcano Brito —compañera por muchos años del dramaturgo—, que llevó a escena muchas de sus obras, y con un excelente trabajo de Carlos Alberto Pérez e Yvonne López Arenal en los papeles protagónicos.

Es un hecho consumado, que el montaje en Miami de obras escritas, estrenadas y premiadas en Cuba, tiene lugar con reiterada frecuencia; pero las implicaciones que representa el de El banquete infinito, por la riqueza de su discurso subversivo, es un caso muy especial y, en el de Alberto Pedro más todavía, por haber fallecido en Cuba en la plenitud de su carrera sin que esta obra se llevara a escena, aunque es reconfortante que el propio estreno reafirme su vigencia.

A pesar (o precisamente a “pesar”) de que el jerarca que ocupa el papel protagónico no es otro que el personaje que abre la obra, a imagen y semejanza del cubano, y que este ha sido la figura determinante del destino nacional, la escena cubana se ha quedado corta en cuanto a darle al “nuestro” el papel protagónico que bien se merece. Los riesgos son muchos, no solo por el compromiso histórico que representa, sino por los escollos estrictamente escénicos, que conozco al dedillo, cuando en 1979 escribí Ojos para no ver, convirtiéndolo en Solavaya. El problema que se le presenta al dramaturgo es la confrontación con la realidad, el enfrentamiento con una problemática nacional del “jamen” (con todas sus implicaciones) que no se ha resuelto. De ahí que el conflicto “paradigmático” de un jerarca con su doble, del original y el espejo, nos lleva, nada más y nada menos, que a un enfrentamiento con el original que inspira el texto, cuyas dificultades asume y supera Alberto Pedro con éxito.

Aunque el dramaturgo resumió su obra como “disturbio autorizado”, tengo mis dudas sobre lo que exactamente quería decir, por varias razones, entre otras, porque los disturbios que se autorizan no son verdaderos disturbios y los que se autorizan hoy pueden desautorizarse mañana. Por la naturaleza misma del jerarca tales decretos no son de confiar. Un jerarca, además, acaba siendo siempre el doble del otro, quítate tú para ponerme yo, cambie o no de uniforme, de careta o de casaca, y con los jerarcas no se juega sin pagar las consecuencias. Matar al “cochino” parece ser un disturbio que puede autorizar la seguridad del estado al llevarse a escena con un cuchillo de utilería, de apariencia inocua, pero al menor juego de manos puede convertirse en un cuchillo de carnicero. Los cubanos han (¿hemos?) sido entrenados en la hermenéutica, y aunque muchos no saben escribir a pesar de estar alfabetizados, son (¿somos?) expertos en leer entre líneas, y hasta de inventar lo que no se entiende con la peor de las intenciones. En tal sentido, somos más ingleses que un personaje de Shakespeare, manejando la intriga del comité de barrio como el más refinado cortesano y buscando la palabra precisa que entierre la puñalada por las espalda y llegue a la yugular sin que le tiemble la mano. Pero el teatro, como en su caso y el montaje que hace Akuara Teatro de El banquete infinito, es una recompensa, y los dramaturgos auténticos tienen que ajustarse al hecho, ya que el teatro sigue siendo la única verdad posible. Cueste lo que cueste. Y es en este sentido que los jerarcas pierden la partida.

El BANQUETE infinito



Foto: Iván Cañas.

Por Luis de la Paz.

Como se sabe, la farsa, es un género teatral donde la realidad es presentada de manera hiperbólica, despertando la risa del público, pero casi siempre aportando una dosis de denuncia social. En El banquete infinito, farsa vertiginosa en una jornada con prólogo y epílogo, del escritor cubano Alberto Pedro Torriente (1954-2005), bajo la dirección de Miriam Lezcano Brito (su viuda), quien también tuvo a su cargo la dramaturgia, se recrea un momento violento, en un país indeterminado (pero no muy difícil de reconocer), donde un golpe de estado saca del poder a un tirano despiadado y violento, y es sustituido por un pacifista, opuesto a cualquier método represivo, pero que también encuentra la resistencia popular, en esta obra representada por las voces de una conga que desde la calle canta “quítate de la acera,/ mira que te tumbo,/que traigo un apetito/ que acabo con el mundo”. Al final, es también derrocado.

Lezcano ha conseguido una puesta dinámica, respaldada por un elenco de primera, encabezado por Carlos Alberto Pérez e Yvonne López Arenal, quienes junto a Micheline Calvert, Leandro Peraza Viso, Tomás Doval y Alain Casalla, conforman un conjunto armónico, que la hacen entretenida.

Alberto Pedro, que vivió y falleció en la isla, escribió esta obra en Cuba, donde también ha sido publicada. Según me expresó Miriam Lezcano, no llegó a escena porque le dijeron que “no era el momento oportuno”. Hoy, con el autor desafortunadamente ausente y la directora Lezcano, fundadora del grupo Teatro Mío e integrante del Teatro Político Bertolt Brecht, ya en Miami, tiene la posibilidad, sin censuras, de llevarla a escena, en la nueva sala Akuara Teatro.

La puesta es visualmente agradable, pero punzante. El humor estuvo casi ausente en la noche del estreno, pienso, porque la realidad alrededor del espectáculo es demasiado dolorosa. Ha sido medio siglo de silencio cómplice, demasiados “perritos falderos que medran a la sombra de los crímenes”, como escribiera alguien en un blog, lo que hace que el sainete no cumpla del todo su cometido.

A pesar de estas realidades propias de nuestra condición de exiliados y víctimas de la tiranía castrista (también hay cómplices por estos lares, incluso rondando la sala Akuara), El banquete infinito, alcanza un trabajo loable. El conjunto de actores bajo la dirección de Lezcano, halla la fórmula, logrando un programa sostenido y rítmico. Algunos personajes arquetipos destacan, como la ladina, cobarde y sumisa Perogrullo, muy bien llevado por Micheline Calvert, así como Averara, papel donde Yvonne López Arenal se crece, como una mujer arribista, que viene desde el conglomerado (el pueblo) y hace y hará lo que sea para sobrevivir en ese ambiente corrupto.

El trabajo de las tres viriles, que encarnan Leandro Peraza Viso, Tomás Doval, y en particular Alain Casalla, como Virilprimera, que viste como geisha, manejando un abanico, a través del cual se expresa, es uno de los grandes aciertos de la puesta, que se consolida con una excelente escenografía de Alba Borrego, en el que cada elemento, desde una escalera, hasta los panes y jamones, crean un efectista conjunto surrealista; todo ello coronado por un ingenioso vestuario, también a cargo de Borrego.

Con El banquete infinito, Akuara Teatro entra en su tercera producción, lo cual va consolidando la sala, donde todavía arrastran deficiencias iniciales, en cuanto al manejo de las luces y el sonido. En esta puesta durante el importante discurso inicial del derrocado Jerarca, la algarabía del pueblo enardecido que se escucha, opaca por completo la interpretación de Carlos Alberto Pérez, que por mucho que se esfuerza, no logra hacerse oír. Sin embargo, en conjunto, la puesta es una acertada propuesta.

El banquete infinito, se presenta los viernes y sábados, a las 8:30 de la noche, en Akuara Teatro, 4599 SW 75 Avenida.
Reservaciones y detalles, en el (786) 853 1283

El banquete infinito, a farce about dictatorship




Fotos: Iván Cañas.

El banquete infinito, a farce about dictatorship
Elvira de las Casas

Miami Hispanic Entertainment Examiner
August 12, 2011

El banquete infinito (The Endless Banquet) is the  production that Teatro Akuara is offering at its new venue of Bird Road’s Art District, in Miami. The company leaded by the Cuban actress Yvonne López Arenal, chose this play written by Alberto Pedro Torriente (1954-2005) to launch officially its first season, with the collaboration of the experienced director Miriam Lezcano. Lezcano adds interest to this performance because of the fact that she was Alberto Pedro’s wife and she lived his creative process firsthand.

The play is a farce focused on the last moments of a dictator and the transition to a democratic government that ends up being another dictatorship. Sounds familiar? Of course it does for the public coming from Latin America. It’s the endless history of our countries, no wonder why Latin people can easily identify the profusion of symbols and metaphors in the dialogs.

In Cuba –where Alberto Pedro lived his whole life under the communist regime– the politic propaganda repeats that Castro fought against Batista’s dictatorship to bring democracy to the country, but Castro’s government ended being a worse, stronger, and absolute dictatorship. Like in the play, the main concern for Cuban people is to find something to eat everyday. In El banquete, most of the times people are protesting on the streets, clamoring for food, while the dictator and his accomplices participate of a non-stop eating feast. Once in a while they throw pieces of bread through the window to calm the starving protesters. 
Both dictators, Jerarca and Paradigma, are excellently played by Carlos Alberto Pérez. The level of performances is pretty uniform but Micheline Calvert and Alain Casalla stand out by their characters of Perogrullo and Viril Primera. Calvert, an actress with a long career and plenty of experience on stage, plays the artist who puts his talent in the service of the dictator. After the change of government he manages to maintain his status offering his services to the new leader. Casalla, on the other hand, has the difficult mission of performing only with the help of his gesture and the movements of a fan, without speaking a word. And he succeeds.

Yvonne López Arenal performs as Ave Rara, the dictator’s loyal lover who keeps taking care of him even though she knows that he is not anymore the romantic hero who she fell in love with. It’s amazing the moderate way she chooses to give a transition from a humorous situation to a dramatic end, avoiding a melodramatic exaggeration. That’s called professionalism and the public thanks her for it.

Akuara Teatro Sala Avellaneda is located at 4599 SW 75 Ave, Miami 33155.
Performances are 8:30 p.m. Friday and Saturday until September. Tickets are $20. Call 786-853-1283 or visit Email- akuarateatro1@gmail.com

"El banquete infinito", el sacrificio traspasado

Foto: Iván Cañas. Elenco de "El banquete infinito": Micheline Calver, Carlos Alberto Pérez, Alain Casalla, Yvonne López Arenal (sentada), Leandro Peraza Viso y Tomás Doval.

‘El banquete infinito’, el sacrificio traspasado

Elenco de "El banquete infinito": Micheline Calver, Carlos Alberto Pérez, Alain Casalla, Yvonne López Arenal (sentada), Leandro Peraza Viso y Tomás Doval

Elena Tamargo
Especial/El Nuevo Herald
Publicado el viernes, 08.12.11

Alberto Pedro decía que el teatro era “disturbio autorizado”. El banquete infinito, que acaba de hacer su estreno mundial hace tres días, aquí en Miami, en la Sala Avellaneda del gustoso teatro Akuara, nunca lo hubiera visto Alberto Pedro mientras el molde de su caricatura existiera. La metáfora de la obra: una sucesión de dictaduras en 24 horas. Las demás metáforas son muchas, porque esta obra tiene hermetismo en abundancia, simbolismo para repartir, y si eso es bueno, por una parte, por otra la vuelve local, hay muchas cosas que cualquier público no puede captar, pero es ante todo una obra muy alegre, que hace reír, que se burla e ironiza.

El elenco está formado por Carlos Alberto Pérez, que hace dos personajes, El Jerarca y Paradigma, al principio es un superdictador y luego un muchacho romántico, que también se transforma; Ivonne López Arenal, Ave Rara, una mujer de pueblo, de bajo perfil, que entra en la segunda dictadura, que se enamora del segundo dictador sabiendo que no será exitoso, pero lo cuida, lo apoya, incluso sin creer en él, por eso se mata antes de matarlo a él, que cuando ella muere él enloquece. Y en el tercer golpe de estado entran las viriles, Leandro Peraza Viso, Tomás Doval y Alain Casalla, personajes que, como los arcángeles, son asexuados, o no se les puede identificar el sexo, pero sí juegan con un símbolo muy fuerte y es que detrás de ese tan macho que es ese comité central o conglomerado que ellos forman, esconden un homosexualismo. Micheline Calvert, Perogrullo, el artista, colmado de símbolos, el saco plateado , la medalla por la cultura nacional, el discurso demagógicoPerogrullo lleva una corbata con diseños de dinero. La china muda de los abanicos tiene sus mangas grandes; Tomás, el ruso, con chapka, y las joyas de Catalina incrustadas.

Esta obra merece una hermenéutica profunda. Ese nivel de simbología tiene que ver con una de las productoras de la obra que además es quien fabrica cada uno de los platos del banquete, esos jamones que cuelgan del techo, muslos, panes, pero también todo el vestuario cifrado. Esa mujer es Alba Borrego, artista de las manos, que ha hecho una labor de extraordinaria plástica y una codificación alta de un mensaje que no puede decirse abiertamente; Alba Borrego ha interpretado excelentemente a Alberto Pedro, artista hermético y difícil de comprenderlo bien.

La música escogida es hermosa y adecuada y todo el escenario es un cuadro, tal vez el espíritu de Jan Brueghel, en quien pensó Mayito García Joya para iluminar ese escenario de manera magistral. La fotografía de Iván Cañas, un extraordinario y reconocido fotógrafo cubano, es excelente.

Mirian Lezcano, un mito del teatro cubano, que vivió junto a Alberto, ha venido a Miami a ofrecernos una excelente dirección de una obra polémica y lo ha hecho con maestría y seguramente con la pasión del recuerdo que se lleva para siempre cuando se ha amado a un artista.

Las actuaciones son todas de una gran fuerza, sobre todo la de Ave Rara por su honestidad, su erotismo y su autoridad que son admirables. Es un teatro crítico, sobre lo que la gente quisiera ver, y de lo que ve, tirarle pan al pueblo para que esté tranquilo. •

Thursday, August 11, 2011

El banquete infinito IV [Alberto Pedro]






Fotos Iván Cañas. 

El banquete infinito IV [Alberto Pedro]

En términos antropológicos, una teoría del éxodo o la égira se refiere a la búsqueda de un espacio fundacional; en el sentido de que toda evolución se frustra en un estadio anterior al de su madurez total, dado que el desarrollo de sus instituciones se vuelve contra esa evolución. El nombre de Éxodo o Égira viene de los casos judío y musulmán, que responden de modo especial a esa dinámica; pero que es un proceso dialéctico que afecta a todo desarrollo, como se ve de la extensión de Occidente a las Indias, del Cristianismo a Roma, la concreción de la Modernidad europea en los Estados Unidos, etc. Respecto al teatro cubano en Miami, eso sería lo que signifique la propuesta de Akuara; que se alimenta de la producción crítica del teatro cubano contemporáneo producido en la isla y no en el exilio, frustrado por las contradicciones de su propio desarrollo. 

En ese sentido, el teatro de Alberto Pedro sería la pieza clave que aporte una renovación crítica de la realidad; al condensar en arquetipos de valor y alcance universal los elementos más vivos —y contradictorios— de la realidad cubana, que es profundamente dramática en su contradicción. Es el caso de El banquete infinito, donde el contrapunteo entre el Ente y su Naturaleza se da en el dueto de Ave Rara y Paradigma; en el que el sacrificio de la Naturaleza [Ave Rara] ocurre por la inconsecuencia natural del Ente [Paradigma] en su proyección. La primacía del Ente, en El banquete infinito, está dada en su introducción; un monólogo del Jerarca que será Paradigma, y que alcanza el nivel de agudeza de El gran dictador de Charles Chaplin y la obrilla introductoria de Antes que anochezca, de Reinaldo Arenas. El Ente está condenado al fracaso por su propia determinación de Ser, que es su pecado original; es la tesis general de la obra, expuesta en esa introducción y argumentada a todo lo largo de la misma. 



Alberto Pedro es así proveedor de personajes paradigmáticos, que recogen el valor representativo por el que los clásicos son clásicos; antes que él, sólo Virgilio Piñera [Electra Garrigó, Dos viejos pánicos, Aire frío] y Eugenio Hernández [María Antonia] lograron algo así; como los únicos que acudieron al valor analógico de la estructura poética como performance total. El teatro de Alberto Pedro Torriente es eso, performances totales, con más de literatura escénica que de teatro en el sentido moderno; una extensión que rescata el valor antropológico de la epopeya y explota el brillo del patetismo para lograr un realismo verdaderamente trascendental. Para nuestra suerte, esta puesta se extiende hasta  septiembre en la sala Avellaneda de AKUARA Teatro; en el 4599 de la 75 ave., en el Bird Road Art District de Miami, con el teléfono 786 853 1283.

Tuesday, August 9, 2011

El banquete infinito III [Ave Rara]

 En la foto, de Iván Cañas, Yvonne López Arenal como Ave Rara.

Tuesday, August 9, 2011
El banquete infinito III [Ave Rara]
Por Ignacio Granados.

La literatura es una continuidad natural de la reflexión, que se revierte y la retroalimenta; en verdad, por su valor formal, eso sería propio de todas las artes; pero más expresa y necesariamente en la literatura, al regirse por un orden sintáctico; que redunda en un discurso organizado de modo más tajante que las otras artes. Pareciera que al confluir en la sensibilidad actoral de Alberto Pedro Torriente, la literatura tuviera entonces un efecto de vaso comunicante; porque en la extrema abstracción de su teatro de cámara reaparecen los tópicos arquetípicos de la literatura, que es una forma de Realismo Trascendental. Es en este contexto, obviamente epistemológico, que se entiende un personaje como el de Ave Rara [El banquete infinito]; que en el sentido más clásico posible, reproduce la misma relación del Ente [Eu] con su extensión como acto en Naturaleza [Eua].

Ave Rara, como suele ocurrir en la realidad de los héroes, no es antagónico ni contendiente; pero no puede evitar su sino trágico, como realidad expulsada o negada en la [pre] potencia del Ente. El tópico es habitual en la literatura, y es fácilmente reconocible en todo drama épico —figura una constante E, Fi es la situación como fenómeno, y Pi es el héroe como Potencia—; la mujer, normalmente pasionaria, que muere o vive como evidencia del fracaso o el triunfo del protagonista. Es sin dudas un gran papel, aunque muy intelectualizado en su complejidad; no obstante, actualiza las mismas dinámicas existenciales de los duetos más clásicos, desde Salomé y S. Juan Bautista, Sansón y Dalila, D. Juan y D. Inés, el Príncipe [amado] y la Sulamita [amada] de El Cantar y el Cántico.

Es de ello, entonces, que se infiere la naturaleza superior de la propuesta de AKUARA Teatro en Miami; una evolución que también cumple dinámicas clásicas, como la teoría del Éxodo, que en este caso aludiría a los niveles de desarrollo. Suerte de la actriz [Yvonne López Arenal] a la que cae un papel así, como reflejo del conflicto mismo del que participa; porque Ave Rara es el espíritu del que la violenta con la irresponsabilidad del héroe, Ariadna en la frustración de Teseo.

‘El banquete infinito’, la historia del clásico CAUDILLO tropical.




Fotos: Iván Cañas.

"El banquete infinito", la historia del clásico CAUDILLO tropical


La farsa negra del dramaturgo cubano Alberto Pedro se presenta en Akuara Teatro

Por Arturo Arias-Polo
Fuente: El Nuevo Herald
Publicado el 05 de agosto de 2011

La relación del hombre con el poder a través de tres golpes de Estado sucesivos centraliza la trama de El banquete infinito, farsa negra del dramaturgo cubano Alberto Pedro (1954-2005), que a tres lustros de creada tendrá su estreno mundial en la sala Avellaneda de Akuara Teatro.

El argumento describe los últimos minutos de la vida de un caudillo que es derrocado por un joven romántico que promete resolver los problemas del país en 24 horas.

“Es el clásico caudillo tropical tercermundista, aunque bien pudiera adaptarse a la realidad de cualquier país donde los políticos hacen muchas promesas en su ascenso al poder y las clases medias y bajas siguen igual que siempre”, expresó Miriam Lezcano, pareja del autor durante muchos años y directora del elenco integrado por Yvonne López Arenal, Micheline Calver, Carlos Alberto Pérez, Tomás Doval, Leandro Peraza Viso y Alain Casalla.

La teatrista se formó en el Teatro de Arte de Moscú, el Berliner Ensemble, la Universidad de La Habana y la Escuela Nacional de Arte de Cuba. Durante su trayectoria en la isla, cofundó el grupo Teatro Mío con Pedro y dirigió la mayoría de las obras de éste y otras del repertorio universal. Lezcano reside en Miami. En los últimos tres años dirigió la comedia Emergencia en el Teatro Roxy, ha impartido conferencias y está al frente de un taller dramático con los pacientes del Programa de Salud Mental del Jackson Memorial junto con el psicólogo Alfredo Pérez.

Entre otros temas, la directora comentó que El banquete infinito se escribió con el propósito de enviarla a un concurso en Grecia. Pero como llegó tras el cierre de la convocatoria no pudo competir.

“Confieso que al principio me pareció una obra muy complicada. Luego me dediqué a otros montajes y así fue pasando el tiempo sin que fuera llevada a escena. Sin embargo, se publicó en el primer volumen de la antología Alberto Pedro: Teatro Mío [Editorial Letras Cubanas, 2009]”, agregó Lezcano, quien concibió una puesta ecléctica en la cual se escuchará música del Trío Matamoros y Tchaikovsky.

Al referirse al elenco, la teatrista dijo que su relación con Yvonne López Arenal, la directora de Akuara Teatro, data de los tiempos en que fue su profesora en los comienzos de su carrera. A Micheline Calver la conocía de cuando ésta pertenecía al grupo habanero Teatro Studio. El resto fue seleccionado mediante audiciones.

“En ese proceso descubrí a Carlos Alberto Pérez, una suerte de James Dean caribeño, con quien me gustaría seguir trabajando”, confesó.

La producción general de El banquete infinito está a cargo de Carlos Rodríguez. Por su parte, la producción ejecutiva corre por cuenta de Alba Borrego y Mario García Joya, quienes asumieron los diseños y las luces, respectivamente. Joan Vega es el asistente de dirección.

Alberto Pedro es uno de los autores más representados y premiados dentro y fuera de Cuba. Cuando muere en La Habana en el 2005, su obra ya se reconocía por su discurso incisivo, directo y cuestionador de la realidad cubana. Aparte de su carrera de dramaturgo, Pedro fue actor, poeta guionista de cine y televisión, docente y teórico. Entre sus trabajos más importantes para la tablas figuran Week End en Bahía, Desamparado, Manteca y Delirio habanero, entre otros títulos.

Estreno mundial de ‘El banquete infinito’
en la sala Avellaneda de Akuara Teatro, 4599 SW 75 Ave., Bird Road Art District, Miami.
Hoy a las 8:30 p.m..
Funciones: viernes y sábados a las 8:30 p.m.
Informes: (786) 853-1283
Email: akuarateatro1@gmail.com

Monday, August 8, 2011

El banquete infinito [la digestión]*.


La foto es del magistral Iván Cañas

Por Ignacio Granados.

El estreno de El banquete infinito en Miami puede considerarse un éxito absoluto, aunque probablemente no satisfizo las expectativas de sus gestores; que enfrentados al abuso del vernáculo político como contexto, quedaron muy por encima del promedio con su sofisticada propuesta. La obra es magistral, como del autor que es [Alberto Pedro Torriente], y la dirección [Miriam Lezcano] estuvo a la altura; pero el humor, que funcionó perfectamente, no estaba dirigido a la carcajada espontánea sino a la sonrisa amarga; porque se trata de una amarga reflexión parabólica sobre las determinaciones de lo político, que es algo más rebuscado que La chancletera llegó a la sagüesera —nada contra el vernáculo, promess—. En este sentido, ciertas caricaturas puntuales pueden haber sido innecesarias o hasta contraproducentes; en tanto rebajaban el arquetipo a lo anecdótico, como hicieron Luis de Funes y Charles Chaplin respecto a Hitler, sólo que ellos lo resolvieron con piezas completas que permitían mantener el conflicto en su carácter y alcance universal. En la obra hay además un homenaje rocambolesco, que pocos fuera del mismo Alberto Pedro podrían disfrutar; con la viz cómica de la bailaora muda de Don Juan, mi querido fantasma, elevada como incidental con valores propios.

Igual se impuso el concepto general, que es de un bordado finísimo, y las actuaciones fueron de la excelencia en general a la dignidad eventual y vuelta a la excelencia; porque el elenco probó que tiene con qué enfrentar este reto dramático, que por momentos resulta desmesurado. Ese fue el caso del protagónico [Carlos Alberto Pérez], frente a la circunstancia fatal del teatro de cámara de Alberto Pedro; que aunque llegó a la masividad de seis actores y siete personajes, mantiene la trama en la desproporción de un dueto con coristas. Esto se refiere a la estructura dramática y la evolución personal del autor, que llegó a la dramaturgia por su propia sensibilidad actoral y poética; con lo que descarga el peso total en el protagonista, al que los demás le son como corales. No es, pues, un defecto sino una peculiaridad que puede aplastar a un buen actor como a una soprano un aria de Wagner; y Carlos Alberto Pérez despliega todos sus recursos y su genuinidad, pero tiene muchos textos largos en casi todas las escenas, y en algunos momentos no logró mantener la misma intensidad [¿coloratura?] en los parlamentos. Gracias a Dios tiene el carácter y un cuerpo enorme, con los que poner coto a la más fácilmente matizada actuación del resto del elenco; pero es que hay demasiada distancia entre un protagónico y la coralidad de los secundarios en el teatro de Alberto Pedro.

Si se cree en la legendaria sagacidad de la directora [Miriam Lezcano], Pérez es la promesa actoral de Miami; por lo pronto las palmas se las llevan, por orden, la Ave Rara de Yvonne López Arenal, y la suficiencia de Micheline Calvert [Perogruyo], Tomás Doval, Alain Casalla y Leandro Peraza [Viriles]. Sobre el coprotagónico de la Arenal, ella debe estar de plácemes, porque al fin el teatro en Miami evoluciona a un arco que admite la catarsis definitoria; permitiéndole convertirse en el punto de giro que ofrece la solución final, frente a una competencia evidente del resto del coro hacia la epifanía final. 

El diseño de luces fue también perfecto en su función, con la salvedad de que por ser de Mario G. Joya alimentó otras expectativas; y palmas para la profusión de utilería y el trabajo de attrezzo y vestuario [Alba Borrego], una buena lección de producción para el teatro local. Miriam Lezcano, eso sí, trajo su concepto con un profesionalismo total; en un escenario lleno con la profusión casi coreográfica del movimiento escénico, a pesar del minimalismo escenográfico, que por una vez —finally— fue conceptual y maduro.

Sunday, August 7, 2011

El banquete infinito continuará todos los fines de semana de Agosto a Septiembre.


 



Fotos: Iván Cañas. Ensayo General.

El banquete infinito de Alberto Pedro continuará todos los fines de semana de Agosto a Septiembre  los Viernes y Sábados a las 8:30 pm. Funciones especiales domingos a las 5:00 pm  por confirmar.

Dirección
Miriam Lezcano Brito

Productor General
Carlos Rodríguez

Producción: Alba Borrego y Mario García Joya

Elenco:

Carlos Alberto Pérez
Yvonne López Arenal
Micheline Calvert
Leandro Peraza Viso
Tomás Doval
Alain Casalla

Ficha técnica:

Asitente de dirección: Joan Vega
Diseño de luces: Mario García Joya
Diseño y realización de utilería y vestuario: Alba Borrego
Notas al programa: Rosa Ileana Boudet
Técnicos de luces: Rolando G. Santini y Elena Montes de Oca
Diseños materiales publicitarios: Ignacio Granados
Fotos: Iván Cañas y Mario García Joya
Grabaciónes Coros: Rogelio López Marín (Gory)
Carteles: Carlos Pitella e Ismael G. Peralta

en

Akuara Teatro – Sala Avellaneda.
Bird Road Art District – Miami.

4599 SW 75 Ave.
Miami. Fl 33155.

786 853 1283
Akuarateatro1@gmail.com

Todos los Viernes y Sábado. 8: 30 Pm del 5 de agosto al 3 de Septiembre.

Funciones especiales de matiné: Domingos. 5: 00 Pm (llamar para confirmación)

Boletos: $ 20.00
Descuento para seniors y estudiantes (mostrando ID)
Estacionamiento gratis.

Saturday, August 6, 2011

El banquete infinito Video 4.




Dirección
Miriam Lezcano Brito

Productor General
Carlos Rodríguez

Producción: Alba Borrego y Mario García Joya

Elenco:

Carlos Alberto Pérez
Yvonne López Arenal
Micheline Calvert
Leandro Peraza Viso
Tomás Doval
Alain Casalla

Ficha técnica:

Asitente de dirección: Joan Vega
Diseño de luces: Mario García Joya
Diseño y realización de utilería y vestuario: Alba Borrego
Notas al programa: Rosa Ileana Boudet
Técnicos de luces: Rolando G. Santini y Elena Montes de Oca
Diseños materiales publicitarios: Ignacio Granados
Fotos: Iván Cañas y Mario García Joya
Grabaciónes Coros: Rogelio López Marín (Gory)
Carteles: Carlos Pitella e Ismael G. Peralta

en

Akuara Teatro – Sala Avellaneda.
Bird Road Art District – Miami.

4599 SW 75 Ave.
Miami. Fl 33155.

786 853 1283
Akuarateatro1@gmail.com

Todos los Viernes y Sábado. 8: 30 Pm del 5 de agosto al 3 de Septiembre.

Funciones especiales de matiné: Domingos. 5: 00 Pm (llamar para confirmación)

Boletos: $ 20.00
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Thursday, August 4, 2011

El banquete infinito: Tercer Video.




Dirección
Miriam Lezcano Brito

Productor General
Carlos Rodríguez

Producción: Alba Borrego y Mario García Joya

Elenco:

Carlos Alberto Pérez
Yvonne López Arenal
Micheline Calvert
Leandro Peraza Viso
Tomás Doval
Alain Casalla

Ficha técnica:

Asitente de dirección: Joan Vega
Diseño de luces: Mario García Joya
Diseño y realización de utilería y vestuario: Alba Borrego
Notas al programa: Rosa Ileana Boudet
Técnicos de luces: Rolando G. Santini y Elena Montes de Oca
Diseños materiales publicitarios: Ignacio Granados
Fotos: Iván Cañas y Mario García Joya
Grabaciónes Coros: Rogelio López Marín (Gory)
Carteles: Carlos Pitella e Ismael G. Peralta

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Akuara Teatro – Sala Avellaneda.
Bird Road Art District – Miami.

4599 SW 75 Ave.
Miami. Fl 33155.

786 853 1283
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Todos los Viernes y Sábado. 8: 30 Pm del 5 de agosto al 3 de Septiembre.

Funciones especiales de matiné: Domingos. 5: 00 Pm (llamar para confirmación)

Boletos: $ 20.00
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Wednesday, August 3, 2011

El banquete infinito: Segundo Video.




"La libertad, Sancho, es uno de los más preciosos dones que a los hombres dieron los cielos; con ella no pueden igualarse los tesoros que encierran la tierra y el mar: por la libertad, así como por la honra, se puede y debe aventurar la vida."
Miguel de Cervantes Saavedra (1547-1616) Escritor español.

Dirección
Miriam Lezcano Brito

Productor General
Carlos Rodríguez

Producción: Alba Borrego y Mario García Joya

Elenco:

Carlos Alberto Pérez
Yvonne López Arenal
Micheline Calvert
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Tomás Doval
Alain Casalla

Ficha técnica:

Asitente de dirección: Joan Vega
Diseño de luces: Mario García Joya
Diseño y realización de utilería y vestuario: Alba Borrego
Notas al programa: Rosa Ileana Boudet
Técnicos de luces: Rolando G. Santini y Elena Montes de Oca
Diseños materiales publicitarios: Ignacio Granados
Fotos: Iván Cañas y Mario García Joya
Grabaciónes Coros: Rogelio López Marín (Gory)
Carteles: Carlos Pitella e Ismael G. Peralta

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Akuara Teatro – Sala Avellaneda.
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Todos los Viernes y Sábado. 8: 30 Pm del 5 de agosto al 3 de Septiembre.

Funciones especiales de matiné: Domingos. 5: 00 Pm (llamar para confirmación)

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Monday, August 1, 2011

El Banquete Infinito: Primer video.





El banquete infinito
de
Alberto Pedro Torriente

Estreno Mundial en Miami

“ ... hasta ahora he tenido la suerte de que lo que escribo, interesa. Y parece que los temas que selecciono mueven al debate de ideas en la gente, que es lo que me interesa. El teatro es eso, “disturbio autorizado”. Creo en el teatro como movilizador, algo que nos sirve para pensar, además de conmovernos. He tenido esa suerte. De todas maneras yo, aunque no tuviera éxito, seguiría escribiendo.” Alberto Pedro. Entrevista de Ileana Azor. “El teatro, disturbio autorizado” .

La Escena Latinoamericana no. 1. febrero de 1993: 64-65. Alberto Pedro Torriente.

Miriam Lezcano Brito fue durante varios años directora del Teatro Político Bertolt Brecht, unos años más tarde fundó y dirigió Teatro Mío de La Habana, junto a su esposo Alberto Pedro Torriente, uno de los mas notables dramaturgos cubanos de la segunda mitad del siglo XX, cuyas obras llevó a la escena creando así un prestigioso y polémico binomio, reconocido tanto en Cuba como en el extranjero, a través de numerosos eventos internacionales a los que fueron invitados.

Teatro Mío tuvo su sede en La Habana, Cuba y fue protagonista de agudas polémicas teatrales, contó con un extenso repertorio, con el cual realizó quince giras a importantes festivales escénicos de la lengua hispana obtuvo relevantes premios nacionales e internacionales. Hoy día Miriam Lezcano Brito es una de las directoras artísticas de Akuara Teatro en la sala Avellaneda. Su trayectoria, su talento y su valor probado enorgullecen a nuestro colectivo.

"La libertad, Sancho, es uno de los más preciosos dones que a los hombres dieron los cielos; con ella no pueden igualarse los tesoros que encierran la tierra y el mar: por la libertad, así como por la honra, se puede y debe aventurar la vida."
Miguel de Cervantes Saavedra (1547-1616) Escritor español.

Dirección
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Productor General
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Elenco:

Carlos Alberto Pérez
Yvonne López Arenal
Micheline Calvert
Leandro Peraza Viso
Tomás Doval
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Asitente de dirección: Joan Vega
Diseño de luces: Mario García Joya
Diseño y realización de utilería y vestuario: Alba Borrego
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