RAQUEL Y OTRAS NOTICIAS
Juan Cueto-Roig
Nunca he puesto en duda la legitimidad de mi admiración por Raquel
Revuelta. Está fundamentada en su arte interpretativo, su magnetismo y su
belleza. Sin embargo, a veces me he preguntado si mi empeño en exaltarla, se
debe sólo al cariño y a la amistad que casi desde mi adolescencia me unió a
ella. Pero cuando leo palabras como las que transcribo a continuación, en un
reciente artículo titulado Raquel
Revuelta, en el espejo de la memoria, de Norge Espinosa Mendoza, un poeta,
dramaturgo y crítico teatral, nacido en 1971, que no la conoció en su época de
mayor esplendor, ni pudo ver las grandes obras que interpretó en la televisión
en las décadas del 50 y 60, ni las que protagonizó en el teatro en esas épocas,
confirmo que mi devoción hacia ella está más que justificada.
EXTRACTO DEL ARTÍCULO DE NORGE ESPINOSA MENDOZA
«Raquel
Revuelta fue, a lo largo de su extraordinaria carrera, mucho más que el
rostro seductor de Un romance cada
jueves. Si a ese famoso programa televisivo debió buena parte de su
popularidad y reconocimiento, alternaba con tales emisiones la subida a las
tablas para no perder el contacto real con un auditorio ante el cual ella fue
Juana de Lorena, Chen Te, Madre Coraje, Santa Juana de América, o una de
las tres hermanas. Laurencia en Fuenteovejuna, Laura en La casa
vieja, Doña Luciana en El becerro de oro, Alissa en Comedia a la
antigua… son otras páginas de ese álbum que ella respiró y nos legó,
intercalados entre los arranques de su inolvidable Doña Bárbara y los
arrebatos de Lucía y Cecilia, a las órdenes de Garriga o Solás. El
tiempo, que suele ser el más cruel espectador, nos arrebató la posibilidad de
verla en otros papeles, y no deja de ser irónico que su última presentación
teatral haya sucedido en México, encarnando a una especie de diva en retiro.
Como sucede con muchos grandes actores, Raquel llegó a sentir el ahogo de
enfrentarse cada noche al lunetario, y sus labores como directora, profesora o
funcionaria fueron desplazando a la actriz que, dondequiera que fuese, seguía
siendo reconocida por encima del olvido y de los años de aparente ausencia. Pero
ese desplazamiento es solo una nota biográfica. Ella era la Actriz, hiciese lo
que hiciese. Las fotos que de ella vemos, donde esplende en varios de sus
mejores empeños o sonríe junto con su madre y su hermano Vicente, nos lo dejan
saber sin arrogancia.
Los que llegamos a conocerla, los que sabemos señalar en qué butaca
de la primera fila de la sala Llauradó prefería sentarse para dirigir ensayos o
ver alguna puesta en escena, recordaremos su paso más o menos ingrávido, y la
fuerza de esa mirada que era capaz de paralizar todo a su alrededor. Más que una
mujer fue un carácter, y de eso provienen las anécdotas que, para bien o mal,
insisten en retratarla de manera extrema. Una actriz talentosa, al referirse a
ella hace algunos años, empleó el término “controversial”. Y quién duda que lo
era. Escondió armas durante la lucha contra el batistato, salió en defensa de
sus actores cuando vino el tiempo gris de los 70, manejó con mano dura el
repertorio y los elencos de Teatro Estudio. Renunció a una vida de mayor fama en
México para salir, tarde por tarde, a su balcón para contemplar La
Habana. Murió para que, entre otras cosas, pudiéramos entender desde su
ausencia que la capital y el país perdían a uno de sus mitos más espléndidos…
Las actrices y los actores de verdadero genio dejan una estela que, acaso sin
saberlo, heredan hoy otros intérpretes: discípulos de lo que ellas y ellos nos
regalaron como ilusión.
Raquel
Revuelta nos mira ahora desde el espejo que es la memoria. Mirémosla como
quien la aplaude, admirémosla como quien le entrega un nuevo ramo de flores,
bajo la lluvia habanera que puede ser una ovación.»
EL LIBRO
El libro Raquel Revuelta, a
la memoria de una gran actriz está ya catalogado en las siguientes
bibliotecas: The Library of Congress, Washington, D. C.; Instituto Cervantes,
Nueva York; Casa de América, Madrid; Biblioteca Hispánica de la Agencia de
Cooperación Internacional, Madrid; Casa de América, La Habana; Biblioteca del
Centro Cultural Español, Miami; University of Miami, Coral Gables; Florida
International University, Miami. Y varias bibliotecas de Dade County y Miami
Beach.
RAQUEL EN LA MIRADA INDISCRETA
El dulce pájaro de la juventud
Con Enrique Almirante
Las gentes quedaron paralizadas en sus casas: nunca antes se había
visto nada tan franco… Soberbia creación de Raquel Revuelta… El mejor programa
de televisión hasta 1964.
Revista Bohemia
El domingo 23 de diciembre, el programa La mirada indiscreta que dirige
Alejandro Ríos transmitirá una entrevista a Juan Cueto-Roig, con motivo de la
publicación del libro Raquel Revuelta, a
la memoria de una gran actriz. Es una ocasión única de ver fragmentos de
actuaciones de la actriz, entre ellas, una escena de El dulce pájaro de la
juventud (Gran teatro del sábado, CMQ Tv., 1964)
La mirada indiscreta se transmite los domingos a las 8:00 pm por América
Teve, Canal 41 (12 en Comcast).